Mientras el paro alcanza máximos históricos, el fútbol español
mantiene su política de
precios desorbitados. La Liga BBVA lidera la
clasificación de las
entradas más caras de las cuatro
grandes Ligas europeas. Con un coste medio que ronda los 53 euros, el
campeonato español está por delante de la Serie A (48), la Premier
inglesa (44) y, sobre todo, la Bundesliga (30).
España presenta un desnivel al alza en cuanto al precio medio y el
precio mínimo. Con la salvedad de los 10 euros en la zona más alta de
Mestalla, el precio menor que ofrecen el resto de clubes españoles no
baja, en ningún caso, de los 25 euros. Significativo es que el importe
mínimo de Getafe o Rayo sea similar al máximo que ofertan City o
Leverkusen.
Tal y como ilustra el gráfico, la Liga tiene las entradas mínimas más
caras y, junto con el calcio, posee, de forma general, también los
máximos más altos.
La Serie A es una Liga de extremos. Ofrece una de las entradas medias
más baratas pero también la más alta. La diferencia se refleja en los
9,50 euros que supone ver al Nápoles y los 160 euros que puede llegar a
costar ver en San Siro al Inter.
La organización en España no es similar al modelo de las otras Ligas.
Sí existen varias categorías, pero no incluyen a tantos equipos. Hay un
precio para partidos habituales; otro para rivales de entidad; otro
para derbis, y dos más para Barça y Madrid, donde el precio puede subir
un 300%. Un ejemplo es la visita del Barça a Pamplona. Si usualmente el
precio en el Reyno va de 36 a 60 euros, ante el vigente campeón subieron
a 90 y 110 para no abonados.
Sólo Espanyol y Barcelona ofrecen en sus webs el precio de todos los
partidos. En base a diferentes categorías, los costes varían respecto a
los precios medios señalados en los gráficos. El caso del Barça es el
más significativo. Si los precios medios mínimos y máximos oscilan entre
los 38 y 116 euros, el coste mínimo baja hasta los 19 euros ante la
visita de Levante y Rayo, mientras que el máximo alcanza los 265 euros
ante Real Madrid y los 167 contra Atlético y Espanyol. En ambas
categorías, el importe mínimo es de 89 y 62 euros respectivamente.
Pero la Liga BBVA también tiene
otra cara,
representada por la Real Sociedad, que establece tres categorías. La más
barata se mueve entre los 25 y 50 euros. La segunda, para rivales como
Valencia o Sevilla, está en 35-60 y, la más cara, para Athletic,
Barcelona y Real Madrid, entre 45 y 100 euros. La mayoría ofrecen
descuentos a niños. En muchos casos, como el Getafe, es gratis para los
menores de ocho años.
Muy superior a los 30 de la Bundesliga y a los 44 de la Premier
En esa actitud de precios a la baja están Inglaterra y, sobre todo, Alemania. En la Premier,
los precios son más bajos que en España e Italia, salvo excepciones
como Arsenal o Chelsea. El elemento definitorio es la tercera categoría
de los equipos ingleses. El Wigan, por ejemplo, tiene un precio mínimo
de 15 euros para público general y de 6 para familias o menores de 16
años.
En cuanto a Alemania, los modernos estadios son
centros comerciales
que, además, ofrecen precios económicos. Y eso que el PIB del país
germano es superior al resto. Tanto la media, como los precios mínimos,
que nunca superan los 18 euros, como los máximos, que abarcan entre los
37,50 euros del Hannover 96 y los 70 del Bayern, retratan por completo
la estrategia seguida en el resto de Europa. Ofrecen una tercera
categoría de precios casi ridículos y descuentos. El Werder Bremen vende
entradas al público general por 11 euros, y el Borussia
Mönchengladbach, por
sólo 6.
¿POR QUÉ ESTA LOCURA DE PRECIOS?
Un Oviedo-La Roda cuesta 25 euros y el Leverkusen-Barça se pudo ver desde 15 euros.
Aunque parezca mentira, un seguidor del Oviedo tiene que pagar 25 euros
para ver cualquier partido de su equipo en Segunda B. En Leverkusen, se
pudo ver la ida de octavos de la Champions ante el Barça por sólo 15
euros.
En España un 23% de paro y las entradas por las nubes.
Lo más sorprendente es que en nuestro país la crisis ha disparado la
tasa de paro hasta el 23%, con más de 5 millones de desempleados, y pese
a estos datos el precio del fútbol sigue siendo el más caro de Europa. Y
eso que el poder adquisitivo de los españoles sigue estando muy por
debajo del que existe en Alemania, Inglaterra, Italia...
Horarios poco propicios... y la gente se queda en casa.
Un lunes a las 21.00 horas o un domingo a las 21.30 no es el mejor
horario para un partido de fútbol y aun así, algunos clubes siguen con
la misma política de precios, por lo que muchos aficionados prefieren
quedarse en casa.
Muchos estadios son muy incómodos para el aficionado.
Problemas para aparcar, malos accesos, frío o calor según la época del
año, buena parte de los estadios de Primera no reúnen las mejores
condiciones para el aficionado. Los elevados precios no vienen
acompañados de la comodidad necesaria para el espectador.
La televisión de pago para todos los bolsillos aleja de los estadios al público.
La televisión manda y el fútbol de pago es apto para todos los
públicos. Por 15 euros puedes ver 36 partidos de Primera al mes y otros
tantos de Segunda. Esto, unido al fútbol en abierto deja al aficionado
en casa.
Con toda esta información no hay duda de que el fútbol español es el más caro de Europa.
Fuente: Marca